El procedimiento para la reconstrucción natural o artificial de las articulaciones dañadas por el desgaste físico o degenerativo lleva por nombre artroscopia y se presenta principalmente en los tobillos, hombros, codos, cadera, muñecas, pero principalmente en las rodillas.
La artroscopia es una operación quirúrgica en una articulación para devolverle la motilidad y/o función, y cuando se trata de reemplazar toda la coyuntura se le denomina artroplastia total.
De acuerdo con especialistas en traumatología, esta cirugía es de mínima invasión, se realiza cuando la artritis está presente sólo en una parte de la articulación (mayormente se presenta en la rodilla). Y varia la duración de dicho procedimiento dependiendo el tipo de lesión.
“Por ejemplo: si hay que tomarle un injerto al paciente, si es por auto injerto; si es por aloinjerto, de banco de hueso; si es un menisco pueden ser 45 minutos del procedimiento, el doble si son los dos meniscos y si es un ligamento cruzado, puede tardar hasta dos horas”.
Se hace con pequeñas incisiones de 3 a 5 pulgadas aproximadamente para que el tiempo de recuperación sea más corto y en ella se extraen tejido y hueso dañados de la articulación de la rodilla y resto de la ésta se conserva.
PADECIMIENTOS QUE CORRIGE
Es un procedimiento que se hace para tratar diversos padecimientos como: lesiones de menisco, ligamentos o de cartílago en rodillas entre otros.
“Aunque la artroscopia no es exclusiva de la rodillas, se puede realizar también en tobillos, hombros, codo, cadera, muñeca, por lo general lo que más se hace es artroscopia de rodilla y de hombro y cada procedimiento es muy diferente, en duración y recuperación”.
Por otro lado mencionó que la incapacidad del paciente dependerá del procedimiento que se le realice; en caso de que se repare el menisco de un paciente, al otro día ya se puede parar, apoyar y caminar, pero para que este listo para actividades pesadas puede pasar hasta un mes.
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